Vilte
Fuller
Vilte Fuller nació en 1996 en Klaipeda, Lituania, y vive y trabaja en Londres, Reino Unido. Se graduó en la Glasgow School of Art (2015) en BA Hons Fine Art: Pintura y Grabado. Fuller realiza pinturas figurativas que representan narraciones de glamurosos paisajes infernales, tomando como influencia el manga de terror y la narración de su herencia báltica. Fuller fue preseleccionada para el Premio HIX 2017 y ha ilustrado varios libros para Eglės leidykla. Entre sus exposiciones colectivas recientes se encuentran "El sueño de la mujer del pescador", Ruttkowski68, París (2021), "A High Hang", Eccleston Project Space, Londres (2019), "Fresh Air/Hot Sauce", Arbyte Studios, Londres (2019) y "TBCTV", Somerset House Londres (2018). La artista anglo-lituana Vilte Fuller aporta un viento de frescura y novedad en un universo a veces aséptico. Forma parte de esa nueva generación de artistas que no temen escandalizar ni desagradar. Vilte plasma en sus pequeños formatos su universo tan particular, tan único, compuesto de contradicciones, yuxtaposiciones e incompatibilidades. En sus lienzos, a veces cosidos, nacen espacios concretos, receptáculos paradójicos de la imaginación de la artista. El cuadro se convierte en una heterotopía, un concepto descrito por Michel Foucault que nos remite a las cabañas de nuestra infancia, lugares reales de los que nace espontáneamente lo irreal. En pocos centímetros, Vilte permite la convivencia de una Sharon Stone muy de Instinto Básico, el universo terrorífico del mangaka Junji Ito y algunas referencias al surrealismo polaco del pintor de pesadillas Zdzisław Beksiński. También descubrimos la herencia del artista integrando el folclore lituano que describe realidades siniestras e imprevisibles que no encajan en los cuentos de "felices para siempre". Toda la genialidad de esta joven artista reside en la disonancia y la capacidad de unir la plástica glamurosa de una figura andrógina con un alienígena fálico con aspecto de pepinillo. Uno al lado del otro, los pequeños formatos de Vilte Fuller aparecen como capítulos de una larga narración, que traza el discreto advenimiento de una generación singular, creadora de una miríada de subculturas. La obra de Vilte es la expresión pura de esto, entre la crítica cáustica al gusto estandarizado, el rechazo a los mecanismos del pasado y la creación de otros espacios. Una nueva "belleza" que cuestiona, intriga e invita a descubrir los retos libertarios del nuevo milenio.