Mevlana
Lipp
"El mundo natural es mágico, misterioso y, en última instancia, incognoscible. El Jardín del Edén es la metáfora original del ser, ese paraíso inimaginable del que el ser humano fue desterrado pero al que parece querer volver siempre, quizá como los románticos que buscaban lo sublime en la naturaleza. Más recientemente, la ciencia ha revelado misterios cautivadores sobre el mundo natural. Los árboles de un bosque se comunican y comparten recursos a través de una compleja red micorrícica de raíces y hongos interconectados. En las profundidades del océano, grupos de organismos diminutos florecen alrededor de chorros térmicos y crecen corales de miles de años de altura. Desde las primeras épocas, la naturaleza ha obligado y aterrorizado a los seres humanos. La artista de Colonia Mevlana Lipp está profundamente fascinada por el mundo natural en estado puro, así como por el espacio que ocupa en la imaginación humana. Para Mevlana, el zarcillo rizado de una vid, la forma redondeada de una vaina de semilla o el suave balanceo de las plumas de un crinoide se convierten en significantes de complejos conjuntos de emociones y experiencias, comunicados en un lenguaje ajeno a los códigos lingüísticos humanos. En parte metáfora semiótica, en parte criaturas primordiales de las profundidades, los organismos orgánicos de la obra de Mevlana atraviesan el tiempo y la conciencia para susurrar sobre el origen de todas las cosas".