Matías
Sánchez
La obra de Matías Sánchez está repleta de iconografía contemporánea, textos, formas y colores, creando complejas composiciones que no dejan a ningún espectador indiferente. Su búsqueda no es la de un contador de historias, sino la de un arquitecto de las formas, que diluye las fronteras entre lo figurativo y lo abstracto. La narrativa no es lo que busca, es simplemente la excusa.
A lo largo de su carrera, Sánchez ha construido una obra que incluye un tipo de figuración muy personal con referencias a sus pintores preferidos como Philip Guston, George Grosz, Otto Dix, Toulouse Lautrec, Pablo Picasso o Jean Michel Basquiat, entre otros. Todos ellos han dado lugar a este pintor autodidacta, lo cual explica parcialmente la frescura y originalidad de su trabajo.
Junto con estas influencias, Sánchez es un artista ligado a la contemporaneidad desde muy diferentes puntos de vista. Su estilo ha metabolizado el lenguaje de la cultura popular. Por ello, su obra puede entenderse como un altavoz de nuestra sociedad.