Evgen
Čopi Gorišek
Evgen Copi Gorisek (n.1994) es un pintor emergente de faux naïf contemporáneo. Sus cuadros tratan de formas figurativas de expresión representadas con atributos de graffiti y dispuestas en un patrón infantil. Las composiciones, de gran intensidad cromática, crean una estrecha asociación con temas cotidianos y la cultura de masas. Los personajes con rasgos faciales borrosos son sus representaciones más frecuentes y reconocibles. El espectador apenas puede identificar sus rasgos masculinos o femeninos, o parece más bien inútil examinar la cuestión de sus identidades de agénero. Estas representaciones sin género -así como otras más aleatorias como un submarinista de Ferrari, un tigre, un jugador de baloncesto, gatitos o culturistas- sintetizan una recopilación de sus motivos típicos. Como él mismo destaca, su inspiración proviene de "cosas aleatorias que ve en su teléfono o simplemente situaciones absurdas en las que se ve envuelto mientras pasea por la ciudad. Muchas veces situaciones de la vida cotidiana de la ciudad combinadas con sentimientos actuales". Esta imaginería de figuras humanas y objetos, que tiende a parecer tridimensional en la superficie del cuadro, coquetea con condiciones más cotidianas que han sido reexaminadas por este joven artista. Estos temas se presentan de forma creativa a partir de las concepciones íntimas subyacentes del artista, dando testimonio de una alegre interacción aerográfica con los deseos y preferencias personales de Gorisek. La obra de Gorisek, sorprendentemente realizada con pintura en spray y lavados de óleo en barra o acrílico, consigue irradiar contradicciones juguetonas y contenidos dispares. Las técnicas de pulverización del artista abren nuevas posibilidades de ocurrencias desenfadadas que ofrecen una atmósfera divertida y un efecto vivaz en el resultado final. Mezclando diversos motivos, el pintor afincado en Berlín empieza a experimentar imágenes de ambigüedad y espontaneidad en sus visuales a través de un amplio espectro de colores vivos. Sus composiciones equilibran estéticamente enfoques contradictorios, creando obras divertidas pero también absurdas para el espectador. Por un lado, sus representaciones incorporan la familiaridad y el apego convirtiendo una iconografía más completa basada en bodegones que simplemente muestran tigres, arco iris, coches y motos. Por otro lado, la extrañeza coexiste en sus obras, ya que sus característicos rostros humanoides enigmáticos, con sonrisas aparentemente untadas y amables y otras muecas ambiguas, también dan sentido a su imaginería. En este punto, la cultura pop y los recuerdos personales se funden artísticamente en la superficie de sus lienzos. Aunque los atributos pop irradian recuerdos alegres derivados de la vida del artista, otras preocupaciones más profundas proporcionan una atmósfera relajada o disposiciones pictóricas más ambivalentes y vagas. Estas obras, que consiguen plasmar hechos reales o historias surrealistas de su vida cotidiana, acaban por desafiar o incluso desencadenar las habilidades creativas del artista sobre el lienzo.